
Según el Senasa se trata de insectos polífagos que pueden afectar a la actividad agrícola en forma directa y a la actividad ganadera, de forma indirecta, alimentándose de los recursos forrajeros y producir daños, también, en la vegetación nativa.
Según esta resolución “toda persona responsable o encargada de explotaciones agrícolas y ganaderas, autoridades sanitarias, y quienes detecten la presencia de tucura quebrachera, como así también realicen controles a través de medios propios o de servicios prestados por terceros, están obligadas a notificar el hecho en forma inmediata al Senasa”. Y además que que “toda persona responsable o encargada de explotaciones agrícolas y ganaderas debe obligatoriamente, en caso de ser necesario, realizar el control de la plaga a través de medios propios o mediante servicios prestados por terceros”. Para ello señaló que se deben “utilizar los principios activos autorizados por el Senasa para el control de la plaga”, y también “permitir el ingreso de los agentes oficiales para realizar, supervisar o fiscalizar las actividades de control establecidas”