Lo publicó El Destape y lo difundió la TV Pública. El kirchnerismo se entusiasma con tener mayor control de la gestión.
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El escándalo del cumple de Fabiola Yáñez en medio de la cuarentena dura sumó otro capítulo luego de que se filtrara el video de ese encuentro que jaquea a Alberto Fernández desde la semana pasada.
El Destape fue el medio que difundió el video y su director, Roberto Navarro, muy vinculado al kirchnerismo, dijo que lo publicó antes de que la oposición lo usara más cerca de las elecciones para golpear al presidente. El Gobierno se sumó a esa maniobra y difundió el video, a modo de control de daños, a través de Télam y la TV Pública.
En la coalición gobernante dijeron que si bien el tema sigue al tope de la agenda, con esta movida se logró que el resto de los medios hablen de la filtración de El Destape y la TV Pública en vez de tener una tapa exclusiva cerca de las primarias.
La periodista que anticipó la foto del cumple en LN+, Guadalupe Vázquez, admitió que “el mismo gobierno filtró #ElVideo a través de un medio amigo como es #ElDestape porque temía que el periodismo lo difundiera más adelante, más cerca de las elecciones”.
“Quisieron anticiparse a que el periodismo publicara el #ElVideo y se lo dieron a un medio K”, tuiteó Mario Negri, jefe del interbloque de Cambiemos en Diputados. “Lo único que confirman es que el Presidente participó de la cena con otras diez personas en la etapa más dura de las restricciones. Hasta un plato para él hay en la mesa”, dijo el cordobés, que tras la difusión de la foto la semana pasada dijo que analizaba presentar el pedido de juicio político contra el presidente.
En la oposición se entusiasman con que el escándalo haya provocado un quiebre en la imagen de Alberto. La semana pasada, un informe de management & Fit mostró que 22,3% de las personas que iba a apoyar candidatos del oficialismo podría cambiar su voto tras la foto.
Un candidato de Cambiemos dijo que las encuestas que manejan en el frente opositor evidenciaron un quiebre pocas veces visto en la imagen de un presidente, más que nada por lo repentina que fue la caída.
La comparación que hacen en privado algunos encuestadores que entusiasma a la oposición es con el caso del español José María Aznar, que perdió las elecciones del 14 de marzo de 2004 tras culpar a la ETA por el atentado de Atocha de tres días antes. El Partido Popular (PP) marchaba primero en todas las encuestas, pero Aznar señaló a la organización terrorista vasca como la culpable del atentado, pese a que después se confirmó que había sido obra de Al Qaeda.
Los encuestadores tienen entonces como referencia de cómo la opinión pública puede castigar a un dirigente por sus palabras en cuestión de días y no necesariamente a raíz de procesos largos.
En el Gobierno, por su parte, filtraron una encuesta de Opina Argentina que indica que Alberto aún conserva el 46% de imagen positiva, aunque la muestra es del 7 y 8 de agosto y se tomó previamente a la difusión de la foto de Olivos.
En el kirchnerismo, en tanto, creen que la caída de la imagen de Alberto puede tener un costado positivo, que es que les permitirá intervenir más en la gestión, que consideran mala en varias áreas. En ese sentido, en el sector de Cristina Kirchner dijeron a LPO que si la vicepresidenta gana lugar en la gestión diaria, ésta va a mejorar.
La vicepresidenta, que el martes le pidió a Alberto que ponga orden, convocó a una sesión especial del Senado para este jueves. Sin temas trascendentales en el temario, en Cambiemos dijeron que lo tomaron como una invitación de la presidenta de la Cámara baja para llenar la sesión de cuestiones de privilegio y hablar del escándalo de la foto.