El expresidente Luiz Inácio Lula da Silva pidió hoy mediante sus abogados a la jueza de ejecución penal Carolina Lebbos su inmediata liberación, en virtud del fallo de la corte suprema que impide detener a un condenado sin haber agotado toda las instancias judiciales, se informó oficialmente.
«Lula no puede estar una hora más preso, sería ilegal y contra el fallo de la corte», dijo el abogado Cristiano Martins Zanin luego de reunirse con el exmandatario en la sede de la Policía Federal en Curitiba.
El pedido fue presentado a la justicia federal para que sea enviado a la jueza de ejecución penal Lebbos, quien no tiene plazo para responder.
«Lula está con la serenidad de los inocentes», dijo la presidenta del PT, Gleisi Hoffmann, luego de ver al exmandatario en su celda y decir que está «sereno» y «con paciencia».
Lula pretende saludar al acampe Vigilia Lula Livre que lo acompaña desde el 7 de abril de 2018 frente a la superintendencia de la Policía Federal y luego viajar al Sindidato de Metalúrgicos de Sao Bernardo do Campo, en el Gran Sao Paulo, su cuna política.
«Lula quiere reingresar a la vida pública desde donde salió», dijo al referirse a que se entregó a la Policía Federal en andas de una multitud en la sede sindical.
Lula no pretende vivir en su departamento de Sao Bernardo do Campo, la ciudad de su fallecida esposa, sino en la región nordeste, de donde es oriundo.
El expresidente, de 74 años, nació en el estado de Pernambuco, pero además el nordeste se ha convertido en el bastión opositor al actual presidente Jair Bolsonaro y está dominado en su totalidad por el PT y partidos de izquierda y centroizquierda.