El bloque de diputados del Frente para la Victoria-PJ, que preside Agustín Rossi, anunció hoy que el miércoles 13, habrá una sesión especial en la Cámara baja para expresar un “repudio institucional” contra el “Golpe de Estado” en Bolivia y pedir por la pacificación del país vecino.

La bancada kirchnerista buscó reunir apoyos para el pedido de sesión, que será presentado este martes en horas de la mañana, dado que este lunes el Congreso permaneció cerrado por el Día del Empleado Legislativo.

Según supo la declaración será repudiar expresamente el “golpe de Estado”, término al que no adhiere el Gobierno nacional, según lo hizo saber el canciller Jorge Faurie.

Además, intentarán bregar por “la garantía de inmunidad física” para el presidente Evo Morales, su vice, Álvaro García Linera y todos los funcionarios.

En el texto también se dejará plasmada la “solidaridad” con el pueblo boliviano y un llamado al “restablecimiento del orden institucional” en el país vecino.

Ya en la piel de futuro canciller, el diputado Felipe Solá entabló contacto con el jefe del interbloque Cambiemos, Mario Negri, a quien este martes le acercará una propuesta de redacción.

Por su parte, Negri buscará saldar las diferencias que se abrieron en el seno del actual oficialismo, dado que un sector importante de la UCR denunció un “golpe de Estado” mientras que en el Pro descartan ese concepto y desde la Coalición Cívica atribuyen la responsabilidad de la crisis al propio Morales.

Si bien el presidente Mauricio Macri todavía no se pronunció públicamente sobre el tema, el canciller Faurie y el embajador argentino en Bolivia, Normando Álvarez García, afirmaron que “no hay elementos para describir la situación en Bolivia como un golpe  de estado”, aunque plantearon la necesidad de que ningún actor asuma un rol no asignado por la Constitución.

En tanto, detrás de la postura que promueve un repudio directo al “golpe de Estado” se encolumnaron en las últimas horas sectores del radicalismo como los que encabezan Alfredo Cornejo, Martín Lousteau y Federico Storani, quienes cuestionaron el modo en que Morales abandonó el poder.

Una postura similar fue la que adoptó, dentro del Pro, el diputado Daniel Lipovetzky, algo que fue celebrado incluso por el presidente electo, Alberto Fernández, a través de Twitter.

Asimismo, desde la Coalición Cívica-ARI emitieron un comunicado focalizado en la responsabilidad de Evo Morales en “el inicio de la alteración del orden constitucional y democrático en Bolivia”, a raíz de su intento reeleccionista.

En las próximas horas, Negri buscará articular estas posiciones, aunque también manejan la posibilidad de no dar quórum en caso de que no haya una posición unificada sobre el tema.

Por su parte, el Frente para la Victoria-PJ tendrá apoyo del bloque Justicialista, compuesto por diputados peronistas de distintas provincias que este lunes se sumaron al repudio al “golpe de Estado” en un comunicado propio.

También brindarán su respaldo, claro está, los diputados de Red por Argentina -liderados por Sola-, el Frente Renovador y otros representantes del Frente de Todos, como Victoria Donda (Somos).