El gobernador de Chaco Jorge Capitanich, confirmó su deseo de ser el próximo presidente del Partido Justicialista (PJ) a nivel nacional, al asegurar que le gustaría «formar parte de la discusión para conducir el PJ en esta nueva etapa», aunque aclaró que su intención no es «pelearse con otros dirigentes» peronistas por la renovación de autoridades partidarias que se realizará en mayo.

En el inicio del proceso de negociaciones para armar la próxima conducción del PJ nacional, que ahora lidera el diputado sanjuanino José Luis Gioja, el «Coqui» expresó sus intenciones de liderar el partido a varios mandatarios provinciales y a referentes del gobierno nacional con los que se reunió la semana pasada en la Casa Rosada.

Durante una entrevista con la agencia de noticias Télam, el ex jefe de Gabinete de Cristina Fernández de Kirchner blanqueó sus aspiraciones: «Me encantaría formar parte de una discusión por la conducción del justicialismo, pero no para pelearme con otro compañero, porque sinceramente acá no se trata de vedetismos ni posiciones personales, sino de una visión colectiva».

«Debemos entender que los gobiernos se suceden, pero el partido y el movimiento son una columna vertebral de representación de base política y popular que continúa«, agregó Capitanich y reflexionó: «El rol del PJ en esta etapa debe ser distinto al actual».

En ese sentido, y en lo que pareció ser una crítica a la actual conducción del PJ, opinó: «El rol que hoy debe tener el Justicialismo en esta articulación con el Frente de Todos debe ser distinto a lo que venimos acarreando, porque podemos tener un problema hacia el futuro por no tomar decisiones a tiempo en términos políticos, y seguiremos presos o esclavos de una visión incompleta de la realidad».

Incluso, el mandatario provincial habló sobre un nuevo rol del peronismo en la política internacional y defendió la ‘tercera posición ideológica’: «El justicialismo también tiene que liderar una convocatoria a nivel mundial con el objeto de establecer un espacio para el debate internacional de lo que significa la distribución de la riqueza, la desigualdad, la justicia social, el hambre en el mundo, las asimetrías entre países y el problema del ambiente y el impacto en la calidad de vida de los pueblos».

Respecto a la opinión del presidente Alberto Fernández y la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, Capitanich fue esquivo en su respuesta y comentó: «Me parece que dada la concepción que tienen ambos, en el sentido de que el partido puede ser conducido formalmente por alguien distinto, lo importante es que nosotros tengamos la voluntad de converger hacia un modelo de organización, participación y conducción que permita un espacio de debate abierto, plural y democrático«.