El Gobierno prepara un proyecto de ley para modificar los regímenes especiales de jubilaciones del Poder Judicial y el servicio exterior.
El borrador, que cuenta con la venia del presidente Alberto Fernández, está siendo trabajado por el ministro de Trabajo, Claudio Moroni, el jefe de gabinete Santiago Cafiero, el ministro de Economía, Martín Guzmán, el titular de Anses, Alejandro Vanoli, y Julio Vitobello, secretario general de la Presidencia y a cargo la Oficina Anticorrupción desde 2009 hasta 2015.
El objetivo es tener el proyecto lista para comenzar a tratarlo antes del 29 de febrero, fecha tope para las Sesiones Extraordinarias que tiene a los regímenes especiales, o “jubilaciones de privilegio”, en el centro del temario del Poder Ejecutivo, según consigna La Nación.
En el caso de la Justicia, el Gobierno propone, en reuniones informales con gremios que representan a los judiciales, subir la edad jubilatoria de los actuales 60 años a 65. También aumentar los aportes al fisco (hoy es del 12 por ciento) de los funcionarios del Poder Judicial, cuya remuneración promedio a la hora de jubilarse es $234.000, un costo fiscal de $1718 millones.
Hoy los jueces de la Corte Suprema, Casación y camaristas aportan un 12% de su sueldo sin tope, una diferencia sustancial con otros sectores, a quienes se les descuenta un 11% de su sueldo, pero con un tope establecido.
“Es cierto que aportan más al sistema, pero también ganan sueldos astronómicos. Y se jubilan con el 82% de su sueldo sin pagar Ganancias”, indicó un funcionario con despacho en Casa Rosada, según consigna el mencionado medio.
Por otro lado, aseguraron que “no hay intención de hacer tierra arrasada ni afectar a nadie”, sino que por el contrario, la iniciativa busca “acercar a esos regímenes a los valores de la mayoría, más normales y menos especiales”.
Al respecto, en Casa Rosada aseguran que una “deformación del sistema” generó que “regímenes que iban a ser sólo para jueces, terminaron ampliándose a otros funcionarios, empleados, asesores.
Por otro lado, fuentes del Gobierno adelantaron que más adelante intentarán “racionalizar” otros regímenes especiales, como los científicos y los docentes, dos sectores que, en su mayoría e históricamente, apoyaron en bloque al gobierno kirchnerista. Y acercarlos a la jubilación mínima, que hoy ronda los $14.000 y cuya fórmula de actualización está congelada.