Gobierno nacional definirá esta semana si aplica o posterga el aumento en los combustibles que corresponde por ley a partir de febrero.
Se trata de un 2,2 por ciento para las naftas y un 1,6 por ciento para el diésel, según explicó Gabriel Bornoroni, presidente de la Federación de Expendedores de Combustibles.
Bornorini explicó que, ante el aumento, el Gobierno debe definir si aplica la suba o si la posterga, como hizo con la tarifa del gas, cuya actualización se aplicará recién en febrero.
En tanto, indicó que los petroleros sostienen que la tarifa actual está desactualizada en un 10 por ciento, mientras que la Secretaría de Energía sostiene que el atraso es del 6,8 por ciento.
“No hay nada de todo esto confirmado. Lo que sí debería pasar por ley es que se actualice el impuesto a los combustibles. Aunque se podría postergar para que el nuevo gobierno tome las medidas políticas-energéticas más convenientes”, estimó.
