El congelamiento del precio de los combustibles finaliza en dos semanas, por lo que desde el jueves 14 de noviembre habrá un aumento escalonado de un 20 % y el litro de nafta pasará de $ 50 a $ 60 en un lapso de tres o cuatro meses.
Gabriel Bornoroni, titular de la Confederación de Entidades del Comercio de Hidrocarburos (CECHA), detalló que “la intención de las petroleras es que se haga una actualización de un 4 % en esa primera semana y continuar con el aumento gradual en un plazo total de cuatro meses”.
El titular de CECHA advirtió que “hay que tener en cuenta que los expendedores no somos los que ponemos el precio final” y resaltó que, en medio de esos meses, habrá que ver cuál es la decisión del equipo económico del nuevo gobierno de Alberto Fernández.
“También hay que ver la política energética del futuro nuevo gobierno. Lo que sí necesitamos es que la Secretaría de Energía sea un ministerio, porque la energía es la columna vertebral de toda la Argentina”, afirmó.
Bornoroni destacó, además, que “el 80 % del aumento que tuvimos en los combustibles fue a causa del dólar” y que a eso hay que sumarle los ajustes impositivos internos, como el impuesto al dióxido de carbono y el impuesto a los combustibles, que por ley se aplican en marzo, junio y septiembre y diciembre.
