Si bien ahora mismo nos costaría ver a un actor que no sea Hugh Jackman en el papel de Lobezno (Wolverine) para la primera adaptación live action de ‘X-Men‘, fue una decisión de casting algo arriesgada. ¿La razón? La altura.

Mientras que el personaje de cómic es un «retaco» de apenas metro sesenta de altura (según las fichas oficiales, va variando según autor), el actor australiano mide 1,88 metros. Una diferencia de casi treinta centímetros que provocó dudas en torno a si era el adecuado para interpretar a uno de los mutantes más populares.

Cuestión de altura

Algo que reconoció el propio Jackman en una entrevista en CNN. En ella confesó con humor cómo cuando desde el departamento de casting le comentaron el tema de la diferencia de altura y que lo mismo era un problema para los fans. Ni corto ni perezoso se le ocurrió que podría estar todo el rato «agachado» y encogido para que no pareciese tan alto:

«Hice como siete audiciones. Recuerdo que hice una audición, y otra y otra y luego fui a ver al jefe de producción. Estuvimos hablando y me dijo: «Oye, sabes, hay este problema. Espero que los fans no tengan un problema porque el personaje debe medir metro sesenta». Y dije: «Tom, ¿de veras? va a estar todo bien. No te preocupes de nada». Literalmente salí caminando así [agachado]. De hecho, en la primera película, nunca me puse los zapatos para que todos los actores a mi alrededor… la regla era que, a menos que fueran niños, tenían que ser más altos que yo. Yo caminaba agachado, sin zapatos, las personas iban sobre tablones y cajas alrededor de mí. Pusieron mucho esfuerzo. Después de un tiempo se dieron por vencidos»

Algo que cuadra con lo que comentó e David Hayter a Inverse: «Estuvo genial, pero era el tipo más amable del mundo y muy alto y super guapo, por lo que no creíamos que fuese Lobezno», confiesa el guionista. Sin embargo, cuando les falló su alternativa Dougray Scott, que por entonces rodaba ‘Misión Imposible 2‘, volvieron a contactar con Jackman.

Una elección de reparto que, finalmente, fue bendecida por el mismísimo Chris Claremont, guionista patriarca de los X-Men de los 70 y 80, cuando Lobezno debutó y se popularizó:

«Cuando se trata de la actuación de Hugh Jackman, la respuesta «de archivo» que doy es esta: Lobezno mide 1,55 y Hugh Jackman 1,88, ¿a quién le importa? Clavó al personaje. No puedo pensar en nadie que pudiera haberlo hecho mejor o incluso igual de bien. Estoy seguro de que alguien surgirá, pero para mí, Hugh Jackman encarnó todas las cosas que hicieron a Logan real para mí como un creador. Es un algo misterioso que simplemente hizo click.»

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