Familiares y amigos de Brenda Micaela Gordillo marcharon en las calles del microcentro, pidiendo que la condena de prisión perpetua en contra de Naím Vera quede firme. El femicida fue condenado en mayo y su defensa objetó los agravantes de la sentencia.

La manifestación frente a Tribunales se dio como siempre con un marcado dolor y carteles y gritos con el pedido de justicia.

“No merece volver a la calle”

María Espeche, madre de la víctima, manifestó que no hay novedades respecto a la causa, a la espera que la condena quede firme.

“No tenemos ninguna novedad y marchamos para que nos den una solución con la condena efectiva. No se merece estar en la calle después de quitarle la vida a mi hija. No vamos a permitir que le mermen la condena a este femicida para que mañana o pasado salga y vuelva a cometer otro femicidio”, declaró Espeche.

“Basta de impunidad y amiguismo en el poder. Necesitamos justicia para mi hija”, exclamó.

Espeche agregó que “seguiremos marchando mientras no tengamos respuestas”, y que piensa que la Justicia “no le van a dar lugar a la casación de este abogado del mismo diablo. Están todas las pruebas. Mi hija era pareja del femicida. Ellos se han mantenido en la idea de bajar la condena. Voy a luchar con el cansancio y el agotamiento que tengo” hasta que la perpetua quede firme y sin posibilidades de revisión.