Según Sheen es posible hallar una explicación científica a por qué los niños no escuchan cómo Santa Claus se desliza por las chimeneas de todo el mundo para dejar sus regalos. El motivo -que ha explicado a los niños asistentes al Science of Christmas Festival de la Universidad de Exeter– es que Papá Noel y sus renos se mueven a una velocidad tal que según la teoría de la relatividad especial ideada por Albert Einstein, se encogerían o adelgazarían en la dirección en la que están viajando, lo que le permitiría introducir el enorme saco de regalos por las chimeneas sin hacer ningún ruido y sin ser visto; ni él ni sus renos. Eso sí, tendría que tener cuidado de no parar para probar un pastel o unos dulces bajo la chimenea o podría volver a su tamaño normal.
Además, el hecho de que Papá Noel tampoco haya envejecido con el paso de los años también tiene su explicación y es, explica Sheen, porque la relatividad puede ralentizar los relojes.
Según los cálculos de Sheen, Papá Noel tendría que viajar a unos 10 millones de kilómetros por hora para entregar a tiempo los regalos a todos los niños que se espera que celebren la Navidad. Si los niños han sido muy buenos, Papá Noel tendrá que moverse a mayores velocidades y los niños serían incapaces de reconocerlo pues aparecería como un desenfoque de los colores del arco iris que eventualmente desaparecería para el ojo humano. La física explicaría por qué entonces Papa Noel rara vez es pillado “in fraganti” por los pequeños, pues viajaría a más de 200.000 veces más rápido que Usain Bolt, el hombre más rápido del mundo.
La física calculó cuán rápido tendría que viajar el Papá Noel al calcular el número de hogares que probablemente estarían celebrando la Navidad en todo el mundo, junto con el número de niños que probablemente estarán en ellos. Sheen espera que su explicación para el sistema de entrega secreta de Papá Noel – y por lo tanto sobre su propia existencia – inspire a los niños a tener un mayor interés en la física.
La ansiedad y el entusiasmo de los niños en la previa a la llegada de Papa Noel se ponen de manifiesto con interrogantes tan frecuentes como difíciles de responder para los padres. ¿Cómo hace Papa Noel para repartir tantos regalos?, ¿por qué nunca podemos verlo?, son algunas clásicas preguntas escuchadas en los encuentros familiares de estos días del año.
La doctora Katy Sheen, física de la Universidad de Exeter en Reino Unido, encontró respuestas científicas a estas grandes dudas existenciales a partir de la Teoría de la Relatividad de Albert Einstein, la cual le permitió no solo especificar la velocidad a la que debería viajar Papa Noel con sus trineos, sino que también explicar por qué los niños nunca pueden verlo.
Se cree que alrededor del mundo 700 millones de niños esperan ansiosos a las 00.00h del 25 de diciembre la llegada de Papa Noel junto a sus trineos cargados de regalos. Teniendo en cuenta que Papa Noel dispone de 31 horas para entregar los obsequios debido a las distintas franjas horarias del planeta, la única forma de visitar los hogares de todos los niños es viajar a 10.000 millones de kilómetros por hora (200.000 veces más rápido que Usain Bolt, el ser humano más rápido del mundo).
Papá Noel viaja a una velocidad de 10 mil millones de km/h para poder repartir todos los regalos en tiempo y forma.
Sheen explicó que «Algunas cosas extrañas suceden cuando alguien comienza a viajar tan rápido. En primer lugar, el tiempo se ralentizaría. En segundo lugar, Santa Claus se aplastaría, lo que significa que puede encajar en una chimenea más fácilmente». A tal velocidad, no es visible al ojo humano, y por ello es que los niños nunca lo ven. El efecto Doppler explicaría el por qué nunca se lo oye, dado que cuando algo viaja a una velocidad superior a la del sonido (1.235 km/h), se vuelve inaudible para el ser humano.
Sin embargo, hay ciertas preguntas a las que la científica no ha encontrado respuesta: “Para que Papa Noel pueda volar tan rápido, se necesita mucha y mucha energía. ¿Cómo consigue alcanzar esas velocidades fenomenales? Bueno, eso es mágico, pero sin duda necesitaría mucho combustible», bromeó.
Desde la Teoría de Einstein, Sheen también intentó encontrar una respuesta al misterio de por qué Papa Noel siempre luce igual, como si nunca envejeciera. Según la teoría física, en esas velocidades tan fugaces el tiempo se hace más lento, por lo que podría explicarse por qué parecería que nunca envejece, manteniendo el mismo aspecto.