La segunda ola de COVID-19 sigue golpeando al país y, en este caso, continúa siendo el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) el sector más damnificado.

Al incipiente aumento del porcentaje de ocupación de las camas de terapia intensiva, ahora, se le suma que algunos hospitales del conurbano bonaerense reportan la escasez de oxígeno medicinal. Según avisaron algunos institutos, el aumento de su uso fue del 300%.

“El consumo aumentó de tal manera que hay faltante de oxígeno porque la demanda supera la producción que hay. Hay comunidades y hospitales cuyos directos empiezan a decir que ahorren oxígeno o que no lo malgasten para no quedarse sin”, afirma en diálogo con Filo.news Claudio Santa María, médico, profesor de Medicina y rector de la Fundación Instituto Superior de Ciencias de la Salud.

Según el profesional, la previsión depende de las instituciones. Mientras hay algunas que poseen reservas para quince días, existen otras que, por su gran recambio de oxígeno medicinal, se ven más amenazadas por este aumento. “Lo que dicen los fabricantes es que aumentó tanto la demanda que tienen miedo de no poder satisfacerla”, explicó Santa María.

Por otro lado, el comunicado que enviaron las autoridades sanitarias regionales fue que los nosocomios más afectados “cuiden el oxígeno, que se use todo lo necesario pero que se regulen los flujos para todos los pacientes que lo requieran”.