Medios de Fiambalá están hablando de una reunión entre funcionarios Obras Publicas del municipio y empleados precarizados y de planta que trabajan en el complejo termal en donde se habría puesto en conocimiento que todas las edificaciones que actualmente funcionan como alojamiento dentro del sector alto de Las Termas “Serán cerrados definitivamente” y que el personal que cumple funciones las 24 horas en el lugar deberán regresar por las noches a Fiambalá y retornar en horas tempranas todos los días.
La medida estaría privando al turismo de acceder a un hospedaje en ese sector como así también sería una manera de “ahuyentar” a los visitantes que desean alquilar para permanecer en el lugar y gozar a pleno de las aguas termales de uno de los mayores atractivos de toda la Provincia de Catamarca.
La cuestionada decisión estaría siendo fundamentada con el argumento que dichas cabañas, dormis y bungalows son ‘una bomba del tiempo’, argumento que se contradice totalmente con los años de vigencia y los distintos aludes que subsistieron esas construcciones.
Desde hace un tiempo atrás se puede observar que el procedimiento de retraimiento definitivo en los hospedajes del sector alto de Las Termas ya comenzó a realizarse de manera lenta para no alertar a la población -que sin dudas hará conocer su disgusto- debido que en la actualidad se puede evidenciar que los bungalows ubicados en el sector del Camping ‘Los Alamitos’ y los dormis de la parte alta del complejo, se encuentran cerrados, sin brindar ningún servicio, en estado de abandono, excluidos de mantenimiento ni inversión que mejore la calidad del servicio, dado que con el nuevo incremento del 50% en el valor de las entradas, no hay trasformación alguna que justifique el destino del millonario ingreso mensual que tiene durante todo el año la Municipalidad de Fiambalá a través de las reconocidas Termas de Fiambalá.
En la actualidad, casi la totalidad del complejo se encuentra en el mismo estado que lo dejó la gestión de Amado “Coco” Quintar.