Según se pudo saber las compañías analizan los pasos a seguir en su política de precios, pero todavía no hay una decisión unánime, ni oficial. Las empresas insisten que luego del último incremento del 5% tras el fin del congelamiento, queda pendiente un 10% de ajuste.
En la Secretaría de Energía de Gustavo Lopetegui tienen otros cálculos. Fuentes gubernamentales mencionan un 4,2% para llegar a valor de exportación y 6,7% para lograr la paridad de exportación ajustada, que tiene en cuenta las importaciones de combustibles de mayor calidad, de Grado 3 o denominadas Premium.
El último aumento del 5% lo digitó YPF, controladora del 54% del mercado. Las petroleras privadas querían más. Pero las autoridades de la compañía de mayoría estatal mostraron cordura y para evitar una escalada inflacionaria mayor, no se movieron del 5%. Lopetegui lo celebró.
Las competidoras de YPF, como Shell (Raízen), Axion (PAE) o Puma (Trafigura) no pueden tomar decisiones unilaterales y ajustar los precios a piacere. Los conductores están sensibles a los cambios en los surtidores y escapan e inmediato a las pizarras de mayor precio. Aumentar por encima de lo que sube YPF implica una pérdida sistemática de clientes, un suicidio comercial, repiten.
Lo cierto es que este fin de semana es muy probable que suban otro 5%. En lo que va del 2019 se registraron nueve aumentos de precios, que da un 30% acumulado, frente a una inflación oficial anual de más de 50%.
Por incremento de impuestos los combustibles subirán alrededor de 2%
La reforma impositiva del Gobierno de Mauricio Macri estableció cuatro aumentos por año: en marzo, junio, septiembre y diciembre. Según la ley 26.966 que fue modificada por la 27.430, los impuestos a los Combustibles Líquidos y al Dióxido de Carbono se actualizan trimestralmente en base a la acumulación del Índice de Precios al Consumidor de los tres meses anteriores, que en este caso serían julio (2,2%), agosto (4%) y septiembre (5,9%). Pero el Gobierno solo habilitó un 5% de ajuste por tributos.
Así, a partir del primero de diciembre las naftas se deberían actualizar un 2,2% y el diésel 1,6% por la carga impositiva pura. Representa entre $1,10 y $1,27 por litro de naftas y entre $0,71 y $0,84 para el gasoil, según los valores de YPF en Capital. La medida tendría que salir publicada en el Boletín Oficial, con resolución de la AFIP. “Si no sale nada, deciden aplazarlo, como en el caso del gas natural, que se pasó a febrero. La actualización de la carga impositiva también podrían pasar a enero o febrero”, avisó un importante ejecutivo del sector.