Julio Castro, dueño de la empresa de remises, explicó que hubo un malestar porque consideraron arbitraria la medida porque «ninguna empresa tiene un punto de higiene en el ingreso y además no permitieron que les mostráramos cómo estamos trabajando».
En ese sentido aseguró que ninguno de los choferes ingresa a la empresa y que tampoco la persona que dio positivo estaba trabajando. «Dicen que incumplimos pero queremos evitar una multa y que nos cierren la empresa porque nosotros vivimos de esto», afirmó.
Tras dialogar con la Policía, pasadas las 22, el numeroso grupo de choferes que había cruzado los móviles sobre avenida Güemes decidió liberar el paso a la espera de una comunicación hoy con las autoridades del COE Provincial y Municipal, como así también con el área de Inspección General de la comuna para que vuelvan a habilitar la base con la que funciona el servicio de remises.