Tiene 52 años y pertenece a la Unidad Demócrata. La Constitución establece que debe llamar a elecciones en 90 días.
La autorpoclamada presidenta de Bolivia Jeanine Añez es una opositora del derrocado Evo Morales que quedó en la línea sucesoria del poder Ejecutivo tras la acefalía ante la salida del mandatario, su vice Álvaro García Linera, el titular de Diputados, Víctor Borda, y la jefa del Senado Adriana Salvatierra.
Nacida en la ciudad de Trinidad, en el departamento de Beni, y de 52 años, Añez es una abogada que fue constituyente de 2006 a 2008, cuando se redactó la nueva Constitución boliviana.
Desde 2010 es senadora por el partido del Plan Progreso para Bolivia-Convergencia Nacional, y fue vice segunda de la Cámara alta, pero ahora como integrante de Unidad Demócrata.
“No es justo que los bolivianos pasemos por esta situación tan dramática; si tengo el acompañamiento, estoy dispuesta a asumir. Pero si se busca otra vía, yo lo que quiero es lo mejor para el país, así que acompañaré”, había señalado.
Añez había agregado que “es un momento histórico y estamos con una enorme incertidumbre”.
El artículo 169 de la Constitución establece que ante la ausencia definitiva del presidente y del vicepresidente, asume funciones el titular del Senado, y a falta de este, el presidente de la Cámara de Diputados que debe convocar elecciones en un plazo de 90 días.
