Luego de que la semana pasada la flamante intersindical comandada por la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) y el Sindicato de Obreros y Empleados Muncipales (SOEM) hicieran pública la decisión de solicitarle al Gobierno provincial y a los municipios un incremento salarial de 10 mil pesos, el gobernador Raúl Jalil salió a ponerle un freno a las peticiones de los gremios.

De regreso a la provincia, tras su participación en la feria minera Prospectors & Developers Association of Canada, el mandatario provincial dialogó con la prensa respecto de la situación económica de la provincia, en medio de un complejo escenario mundial y nacional.

Jalil hizo hincapié en que durante los últimos años, Catamarca fue una de las jurisdicciones que mayor porcentaje de incremento salarial dio en el país, pero aclaró que el contexto está cambiando y, por eso, le solicitó al ministro de Hacienda Pública que aún no acuerde ningún incremento salarial con los gremios. “Le pedí al ministro Véliz que se reúna con los sindicalistas y que en esta semana no decida el aumento salarial, sino que esperemos. Catamarca viene de tres años con la cláusula gatillo y comparada con otras provincias, somos la tercera provincia en cuanto a mejora salarial, pero la caída en la recaudación está siendo muy importante y hay que estar al lado de la gente, ver qué plan social dar”.

Además de la disminución de la recaudación nacional y provincia por la recesión que sufre el país y que afecta de manera directa los ingresos de la provincia tanto por Coparticipación Federal como por la recaudación propia, el mandatario hizo hincapié en el contexto económico mundial, señalando que “el tema del litio me decían que recién en junio se va a resolver, en China cayó un 95 % la venta del autos, el tema del turismo internacional hay que ver qué hay países se están aislando. Creo que no debemos dar aumento sin saber exactamente qué es lo que está pasando y, por eso, nosotros llamamos al diálogo”.

Consultado específicamente por el monto de 10 mil pesos solicitado por la intersindical que comandan Walter Arévalo (SOEM) y Ricardo Arévalo (ATE), Jalil respondió de manera contundente y dijo que es “imposible”. En ese sentido, insistió en que “ni los municipios ni la Provincia están en condiciones de tomar ninguna decisión hasta ver qué es lo que pasa con la situación económica mundial y nacional”.

La intersindical insistirá en el monto del aumento

Conocidas las declaraciones del gobernador Raúl Jalil, desde la flamante intersindical de empleados estatales confirmaron que insistirán con el pedido de incremento salarial de 10 mil pesos, a través de una nota que llevará la firma de los gremios que la integran.

El encargado de responder a la negativa de Jalil fue el secretario general del SOEM, Walter Arévalo, quien anticipó que el próximo jueves “convocamos a una reunión a los gremios que representan a los trabajadores estatales para hacerle ya un pedido concreto con la firma y sello de cada entidad, donde acordamos el pedido de incremento salarial porque la nota fue presentada de manera particular por cada sindicato”.

El gremialista fundamentó que incluso logrando un incremento de 10.000 pesos, los trabajadores de los municipios del interior tendrían sueldo de entre 22 mil y 32 mil pesos, lejos de los 42.900 pesos que se necesitan para no ser pobre en Argentina. Incluso, señaló que buena parte los municipales de la Capital tampoco llegarían a alcanzar a la canasta básica, ya que los empleados de la categoría más baja llegarían a un sueldo de 37.500 pesos.

Por este motivo, el sindicalista consideró que “no es un pedido exagerado. Los trabajadores no queremos de más, pedimos lo que creemos que puede servir para ayudar”.

Respecto de las declaraciones de Jalil y los intendentes que indicaron que no están en condiciones de otorgar un incremento de 10.000 pesos, Arévalo sentenció: “Creo que ellos se metieron en política para ser inventivos, ellos tienen que buscar la solución, nosotros somos trabajadores. Sus discursos son para la popular”.