
El fiscal pidió nuevos testigos. Ayer se reanudó el debate luego de diez días parado. Continuará el lunes.
“Supuestamente habían tenido un problema anterior”, declaró Pedro Pablo Vera, en relación con la muerte de José María Armendia. En febrero de 2018, este joven recibió una golpiza que lo dejó inconsciente durante 14 meses, hasta abril de 2019, cuando falleció. Alexis “Palmera” Silva” ocupa el banquillo de los acusados para responder por el delito de “homicidio preterintencional”.
El debate –que se inició la semana pasada- se desarrolla en la Cámara Penal de Segunda Nominación. El Tribunal está integrado por los jueces Luis Guillamondegui, Fabricio Gershani Quesada y Rodrigo Morabito. Junto con el Ministerio Público Fiscal, se encuentran los abogados del foro local Pedro Justiniano Vélez, en representación de la querella, y Rafael Bracamonte, por la acción civil. Enfrente, el abogado Víctor García, a cargo de la defensa.
El testigo Vera contó que conocía al imputado “de vista”. El día de la pelea, su hija cumplía años y habían preparado una fiesta. Terminada la fiesta, Armendia y dos jóvenes más se fueron a la parada de colectivos para volver a su casa. Luego, el testigo escuchó “no le peguen”. Salió para ver qué sucedía; “‘Palmera’ me pegó y quedé medio mareado”, indicó.
“Yo soy ‘Palmera’ Silva, tengo plata y hago lo que quiero”, recordó que dijo el acusado. “Ya va a llegar la Policía, vamos a ver si hacés lo que querés”, contó que le había respondido su esposa. Con amenazas, “Palmera” se fue.
El testigo insistió en que a Armendia lo golpeaban mientras estaba tirado en el suelo. A un metro de distancia se encontraba el casco con el que, se sospecha, Silva lo golpeó. Según su versión, su hija le había contado que “Palmera” tenía el casco puesto y se lo sacó para golpearlo. “El casco quedó tirado. Supuestamente habían tenido un problema anterior”, indicó. El problema habría sido entre un amigo de Armendia, Enzo Romero. Cuando Vera advirtió sobre la pelea y quiso intervenir, el amigo de “Palmera” le dijo: “Con usted no quiero tener problemas porque es vecino mío”, mientras lo golpeaban a Armendia, que estaba tirado en el suelo.
Luego fue el turno de Enzo Romero (23). El joven admitió que al acusado lo conoce “del barrio”. “Que se haga justicia por mi amigo”, expresó a los jueces. Según recordó, aquella madrugada de febrero, junto con Armendia y otro muchacho salían de la fiesta de su prima. Esperaban el colectivo para volver a la casa. Después, le pegaron una piña “a su amigo. Me metieron en la casa de mi tía. Cuando salí, Armendia estaba tirado en el piso.
De acuerdo con la versión de este testigo, tiempo atrás en el dique El Jumeal lo habían patoteado, pero no denunció “por miedo y para no tener dramas con nadie”. Esta pelea había sido con “Palmera”. Sobre el día de la fatalidad, indicó que Armendia vestía una camiseta de Estudiantes de La Tablada y “Palmera” tenía puesta la remera de Policial.
Para Romero, la paliza a su amigo pudo ser por dos motivos: no lo dejaron entrar a la fiesta de su prima y su hermana (ambas cumplían el mismo día) o por las camisetas de fútbol. “Antes del dique había bronca (con “Palmera”). Nos cruzábamos en la cancha”, admitió. No obstante, dijo desconocer los motivos de la pelea en el dique.
Al cierre de la jornada, el Ministerio Público Fiscal solicitó que sean llamados a comparecer nuevos testigos. La querella adhirió al pedido, aunque la defensa se opuso. Sin embargo, el Tribunal hizo lugar a lo solicitado por la Fiscalía. Luego, se pasó a un cuarto intermedio. El debate se reanuda el lunes, con la comparecencia de testigos.
La causa
José María Armendia (21), la víctima, fue atacado en la madrugada del domingo 19 de febrero de 2018 cuando regresaba de una reunión familiar en el barrio 40 viviendas sur. Se dirigía a pie a su casa en el barrio La Tablada cuando fue rodeado por una patota. Uno de los integrantes lo empujó y lo golpearon en la cara con un casco de moto por lo que perdió la estabilidad y cayó al suelo.
Ahí sufrió varias patadas y terminó golpeando su cabeza contra el cordón cuneta. Los agresores lo dejaron tirado y se marcharon del lugar. Armendia fue llevado en ambulancia al Hospital San Juan Bautista en donde quedó internado en terapia intensiva a causa de su grave estado. Con la toma de testimonios y otras pruebas, se identificó a uno de los agresores, Silva, que quedó detenido. En aquel momento, febrero de 2018, cuando el joven aún vivía, el sujeto se presentó en Fiscalía Penal y fue indagado por el delito de «lesiones graves» por el que había sido imputado. Posteriormente, tras conocerse el deceso de Armendia, el 1 de abril de 2019, el fiscal le agravó el delito.
No hubo lugar para el “hecho diverso”
En la primera audiencia, el abogado de la querella, Pedro Justiniano Vélez, había planteado un “hecho diverso” tras la declaración de la primera testigo. Para Vélez, había elementos para considerar que «Palmera» Silva sea imputado por el delito de «homicidio simple». Si bien el Ministerio Público Fiscal no compartió el criterio, tampoco se opuso. En tanto que la defensa, ejercida por el abogado Víctor García, sí se opuso y consideró que la querella realizó un planteo “prematuro”.
El Tribunal resolvió no hacer lugar al planteo. De acuerdo con los fundamentos, a los que El Ancasti tuvo acceso, se consideró que el fiscal de Cámara es la parte procesal habilitada para solicitar la ampliación de la acusación fiscal o la determinación del hecho diverso durante el plenario.
“No debe olvidarse que el titular exclusivo de la acción penal pública es el Ministerio Público Fiscal, a punto tal que si éste decide no promover la persecución penal, nada puede hacer el querellante particular en los delitos de acción pública en razón de la naturaleza adhesiva de su intervención. Apreciamos que el pedido del querellante particular -no instado primigeniamente ni compartido por el representante del Ministerio Fiscal- deviene “extemporáneo”, en el sentido de que el requirente tuvo distintas oportunidades procesales para promover la modificación de la plataforma fáctica de la acusación y no lo hizo. Tal lo destaca la defensa y no deja resultar “prematuro” en esta instancia del debate”, se advirtió.
Conocida la resolución del Tribunal, se reanudó el debate con los testigos.