
Gabriela Vera (24) y Ángel Santiago Casado Tolosa (20) se abstuvieron de declarar ayer ante el juez federal Miguel Ángel Contreras por “tenencia con fines de comercialización” tras ser detenidos la semana pasada con cocaína, marihuana y dosis de LSD.
Vera es hermano de Naim Vera, quien está imputado por el femicidio de Brenda Micaela Gordillo ocurrido en marzo pasado. El procedimiento en el que cayó junto con un amigo se realizó el jueves pasado en pleno centro de la ciudad y estuvo a cargo de personal de Drogas Peligrosas de la Policía.
Según la información a la que accedió este diario, Vera venía siendo investigado desde el año pasado, pues recaían sobre él serias sospechas relacionadas con la presunta venta de drogas en locales bailables. Si bien no fue detenido en esas circunstancias, en abril pasado había sido sorprendido con escasos gramos de marihuana en un control rutinario.
El jueves pasado, personal de Drogas que lo investigaba lo sorprendió cuando caminaba con un amigo por calle Rojas. Ambos se habrían percatado de que eran observados por lo que intentaron huir, pero finalmente fueron interceptados y reducidos en Almagro y Junín.
Metros antes, los jóvenes se despojaron de algunos elementos que fueron encontrados por personal policial debajo de un rodado.
Igualmente, al requisarlos a cada uno, los policías encontraron entre sus pertenencias 283 gramos de cocaína, 118 gramos de “cogollos” de marihuana, un troquel de cinco celdas de LSD, dos cigarrillos de armado casero – comúnmente denominados porros de marihuana-, 56 semillas de cannabis sativa, dos teléfonos celulares, dinero en efectivo por la suma de $4.700. También se secuestró un automóvil Honda City.
Antes de intentar huir, los jóvenes habían salido de un departamento, propiedad de Vera, ubicado por calle Maipú casi esquina Rojas.
Esa propiedad también fue allanada y en el lugar los investigadores secuestraron 285 gramos de “cogollos” de marihuana, una balanza “tipo gramera”, bolsas de nailon transparente y una caja de cartón donde se encontraba contenida la sustancia.
Los procedimientos se realizaron bajo las órdenes del Juzgado Federal de Catamarca. Tras contar con las actuaciones de ambos procedimientos, el fiscal federal Santos Reynoso envió el requerimiento de instrucción al Juzgado Federal solicitando que ambos jóvenes sean investigados por el delito de “tenencia con fines de comercialización”.
Ayer ambos fueron indagados y decidieron guardar silencio. No se descarta que puedan hacerlo en los próximos días.