El Mustang Shelby GT 5.0 tiene 460 caballos de fuerza. En menos de cuatro segundos puede llegar a 100 km/h. No está claro si ese era el objetivo que se había propuesto un joven conductor de 22 años. Lo cierto es que aceleró a la salida de un semáforo, en el partido bonaerense de Merlo y, a unos treinta metros, lo terminó estrellando contra un poste de luz.
El auto es modelo 2017 y su valor estimado en el mercado ronda los 70 mil dólares (unos 10,5 millones de pesos, aproximadamente). Jonathan Díaz (22) lo conducía buscando llamar la atención. Los testigos coinciden en un punto: minutos antes del accidente (ocurrido el domingo pasado en horas de la tarde) venía realizando maniobras peligrosas y a alta velocidad.
En el semáforo de la calle Victoriano Loza y la avenida Calle Real, en Merlo, el conductor salió “quemando gomas”, enseguida hizo un medio trompo, se subió a la vereda y chocó con un poste. Por milagro, no hubo víctimas.
Fuentes policiales indicaron que el joven sufrió heridas menores y tuvo que ser asistido en el lugar por personal de Defensa Civil y Bomberos Voluntarios.
Antecedente reciente
El caso, aunque con otro final, recuerda el trágico accidente ocurrido también el domingo en Tigre, cuando un Audi A4 se estrelló, a altísima velocidad, contra una columna metálica.
El coche era manejado por Joaquín Duhalde Bisi, de 19 años. A raíz del violento impacto, murieron dos de sus amigos, Franco Rossi (18) y Joaquín Alimonda (19). El cuarto ocupante del coche de alta gama, Mateo Lezama (18), no sufrió lesiones.
De acuerdo a las fuentes, el conductor dio positivo de alcoholemia con 1,38 al momento del accidente, el triple de lo permitido. Desde el domingo se encuentra detenido acusado por el delito de “doble homicidio simple con dolo eventual”, que prevé una condena de 8 a 25 años de prisión.
