El presidente electo, Alberto Fernández, a partir de un plan que está elaborando Gustavo Béliz -que ocupará el cargo de secretario de Asuntos Estratégicos- analiza disolver la Agencia Federal de Inteligencia (AFI).
El presidente electo desea resolver este asunto político en sus primeros siete días de gestión, y aguarda una última reunión con CFK. Y además considera la posibilidad de crear una unidad de lucha contra la corrupción y el lavado de dinero que ofreció a Ricardo Alfonsín, quien analiza la propuesta.
También analiza cambios en lo que es la Oficina Anticorrupción, a cargo de Laura Alonso. Ni tampoco lo quiere a Mariano Federici, presidente de la Unidad de Información Financiera de la República Argentina (UIF). Tanto la Oficina Anticorrupción (OA) como la Unidad de Información Financiera (UIF) son reconocidas en los tribunales federales en los principales organismos multilaterales (OCDE, GAFI, ONU) por su seriedad y transparencia. Por otra parte, Federici tiene el respaldo de la Casa Blanca y además, un cargo estratégico a nivel global en Egmont Group of Financial Intelligence Units, una red informal de 164 unidades de inteligencia financiera (UIF) de países del mundo que recopilan información sobre actividades financieras sospechosas o inusuales de la industria financiera y otras entidades (como también profesiones) para informar transacciones sospechosas de lavado de dinero o financiamiento del terrorismo, Estados Unidos anticipó que si Fernández no lo mantiene en ese puesto, Argentina perderá ese lugar clave en el organismo multilateral más importante en la lucha contra el lavado de activos y dinero sucio.
¿Por qué esta posible embestida contra Laura Alonso y Mariano Federici? Una respuesta la dio la misma Cristina Kirchner cuando compareció por la causa Vialidad:
“El Gobierno utilizó la Oficina Anticorrupción y la UIF para impulsar las causas judiciales. El rol de la señora Laura Alonso, no abogada, que asume la OA. Se modificó el decreto para que pueda asumir. ¿Quién es el titular de la UIF? Mariano Federici, un ex funcionario del FMI. Eso no es reprochable, pero Federici viene del HSBC, una entidad financiera que ha sido internacionalmente perseguida por lavado de dinero. Y el HSBC tiene una causa en la Argentina”.
Es por esto que Alberto Fernández creara una sola unidad con la OA y la UIF , a cargo de un político prestigioso con rango de secretario de Estado. Ricardo Alfonsín está ante un desafío que -según opina Lejman- se trata de un camino sin retorno.