El Testicuzzi es un invento muy particular, pensado por y para los hombres con el propósito de darles placer y serenidad de una forma rápida y sencilla. Esta mini bañera con hidromasaje y tecnología de última generación fue diseñada especialmente para que los testículos reposen en un suave masaje de burbujas y agua caliente.
«Lo que comenzó como una conversación divertida entre amigos hace un año, rápidamente se convirtió en una conversación de “¡Deberíamos hacer esto por completo!”‘, dice el sitio web.
No se trata de un juguete erótico, sino más bien de un dispositivo similar a un bidet, pensado para que solo entren los genitales masculinos.
Este «testicuzzi», entra en una mano y tiene la capacidad de llenarse con agua para que luego pueda circular por un sistema de aire a presión, consiguiendo el efecto propio de un jacuzzi. Hay de varios colores, para todos los gustos y en tres modelos distintos: blanco, negro y dorado. Este último cuesta 10 mil dólares (595 mil pesos argentinos) y la peculiaridad es que está hecho con oro de 14 kilates, lo que, claramente, encarece su costo. Los demás son más sencillos y tienen un precio que ronda los 40 dólares (2.380 pesos).