26 diciembre, 2019 12:28
Aunque parece de película, una mujer se dio cuenta que el cuadro en la cocina de su casa era una obra de arte que terminó siendo valuada en una millonada de dinero.
El cuadro en la cocina valía muchos millones
Parece mentira, pero no lo es. Un hombre tenía un cuadro en la cocina y sin saberlo, estaba guardando una de las obras de arte más significativas de los últimos tiempos que supera el valor de los 20 millones de dólares.
Se tarta del “Cristo burlado”, una obra del siglo XIII que estaba colgada en una casita en Compiègne, al noreste de París. Al parecer, un tasador que estaba mirando viejos muebles en la casa de una mujer que se estaba mudando encontró un cuadro en la cocina y notó que había algo diferente de él.
Por puro azar, dio con el paradero de una obra del pintor primitivo Cenni di Pepo, más conocido como Cimabue (1272-1302), una de las mayores figuras del prerrenacimiento italiano, y que además está vaulado en más de 26 millones de dólares.
Esto representa la cifra más alta jamás pagada por una obra medieval y sin dudas, representa un tesoro que tenía guardado en la cocina y que no lo supo hasta que el ojo correcto se posó sobre ella. Como era de esperarse, la cifra superó largamente la cifra prevista antes de la subasta: entre 4 y 6 millones de euros era su valor proyectado.
Por supuest, el valor agregado de la anécdota disparó por los aires su valor real y además, ahora que Francia bloqueó la exportación del cuadro y lo clasificó como “tesoro nacional”, se volvió aún más exótico y requerido.
Lo cierto es que por ley, las autoridades francesas ahora tienen 30 meses para hallar los fondos necesarios y volver a comprar el cuadro, lo cual tiene un costo de 24 millones de euros. Para la cultura francesa, es fundamental que este cuadro vaya junto a otras obras del artista italiano en el Museo del Louvre.
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